Colérico, Flemático, Nervioso y Sanguíeno. Los cuatro temperamentos básicos o puros.
- Enrique R. Ansaldi
- 22 feb 2022
- 3 Min. de lectura
El TEMPERAMENTO IDEAL; S simpatía, gran corazón, vivacidad, N profundidad, delicadeza de sentimientos, C actividad inagotable, tenacidad, F dominio de sí, prudencia, perseverancia.
Los medios secundarios INTERNOS para el desarrollo de la Gracia: son los resortes psicológicos (entendimiento y voluntad) y los resortes fisiológicos (temperamento).
Los medios secundarios EXTERNOS: plan de vida, lectura espiritual, amistades santas, apostolado, dirección espiritual.
1. El Colérico o bilioso es riquísimo. Se excita pronto y violentamente. Reacciona al instante. Guarda la Impresión en el alma por mucho tiempo.
Corazón sensible. Un ejemplo es San Pablo.
Su buenas cualidades:
Activo
Entiende agudamente
Voluntad fuerte
Concentración, constancia, magnanimidad, liberalidad.
Gran apasionado y voluntarioso.
Práctico, despejado, más que teórico, más inclinado a obrar que a pensar. Le repugna el reposo y la inacción.
Proyectos grandes, "manos a la obra", no se arredra por las dificultades.
Jefes, conquistadores, apóstoles, gobernantes.
No deja para mañana... hace hoy lo que debería dejar para mañana.
Se esfuerza ante los obstáculos e inconvenientes.
Ímpetu irascible que por propia dominación alcanza suavidad y dulzura.
Sus malas cualidades:
Dureza, obstinación, insensibilidad, ira y orgullo.
Si se le resiste y contradice: violento y cruel.
Vencido, guarda el odio en su corazón hasta la venganza.
Ambicioso, tiende al mundo y la gloria.
Cierta paciencia, pero sin delicadeza de sentimientos, comprende menos el dolor de los demás, tacto menos fino (respecto del Sanguíneo).
Pasiones fuertes e impetuosas que ahogan sus afecciones dulces y sacrificios desinteresados.
Pisotea violentamente todo lo que le retarda (y aparece ante los demás como egoísta sin corazón)
Trato altanero (hasta cruel)
Todo debe delegarse ante él.
Único derecho: satisfacción de sus apetitos y realización de sus designios.
2. El Flemático:
Nunca se excita o solo débilmente.
Reacciona débilmente o no reacciona.
La impresión desaparece pronto y no deja huella en su alma.
Tipo Santo Tomás de Aquino.
Buenas cualidades:
Trabaja despacio pero asiduamente (no admite exigencia intelectual grande)
Se irrita difícilmente por insultos, fracasos o enfermedades.
Tranquilo, sosegado, discreto, juicioso.
Sobrio, sentido práctico de la vida,
No conoce las pasiones vivas del sanguíneo ni las profundas pasiones de nervioso ni las ardientes del colérico. Carece de pasiones.
Lenguaje claro, ordenado, justo, positivo, tiene energía y atractivo.
Trabajo científico (paciencia, investigación concienzuda). No hace grandes producciones originales.
Corazón bueno, parece frío.
Sacrificio hasta el heroísmo, le falta entusiasmo y espontaneidad, naturaleza indolente y reservada.
Prudente, sensato, reflexivo, obra con seguridad, llega al fin sin violencia (aparta los obstáculos, no los rompe)
A veces su inteligencia es muy clara.
Físicamente: rostro amable, cuerpo robusto, andar lento y cachazudo (lentitud, calma).
Malas cualidades: Tarda mucho en ponerse en marcha. No se interesa de lo de fuera. Vive para sí. Concentración egoísta.
No vale para el mando ni el gobierno.
No es aficionado a la penitencia y la mortificación.
Átono, dormilón, vago, insensible a las voces de orden superior que podrían sacarlo de su letargo.
3. El Nervioso: San Juan Apóstol.
Excitabilidad débil y difícil al principio, fuerte y profunda por repetidas impresiones.
Reacción débil y difícil al principio.
Duración larga, no olvida fácilmente.
Buenas cualidades: sensibilidad poco viva pero profunda.
Reflexión, es pensador.
Contemplativo
Intelectual seco y egoísta
Atraído por el arte, apto para las ciencias, corazón. gran sentimental.
Ama profundamente, se desafecta.
Soledad, silencio
Quietud
Piedad
Vida interior
Se compadece fácilmente de la miseria del prójimo
Bienhechor de la humanidad
Abnegación hasta el heroísmo (más al lado del enfermo)
Inteligencia aguda y profunda, reflexión y calma para madurar las ideas.
Sufre la frialdad y la ingratitud.
Voluntad según su fuerzas físicas: débil y nula cuando el trabajo lo ha agotado; fuerte y generosa en salud o alegría.
Sobrio, no siente el desorden pasional.
Opuesto al sanguíneo (como el colérico es opuesto al flemático)
Malas cualidades:
tendencia exagerada a la tristeza y la melancolía
Heridas sangrantes por fuertes impresiones
Corazón muy en el fondo (se amarga a solas y exagera las dificultades)
Retraído y tímido (desconfianza, desaliento, indecisión, escrúpulos, misantropía)
Irresoluto, ("nunca acaba de acabar"), oportunidades perdidas.
Sufre mucho.
4. El Sanguíneo:
Excitación fácil y fuerte, reacción inmediata y fuerte y de corta duración, el recuerdo no le provoca nuevas emociones.
San Pedro apóstol.
Buenas cualidades:
Afabilidad
Alegría
Simpatía
Obsequioso
Sensible
Compasivo
Dócil
Sumiso
Sincero
Espontáneo
Ante la injuria reacciona a veces violentamente con expresiones ofensivas. Olvida prontamente. No guarda rencor. No es terco ni obstinado.
Sacrificio desinteresado.
Entusiasmo contagioso.
Buen corazón. Seducción.
Sentido práctico de la vida. Más idealiza que critica.
Riqueza afectiva, amigable (amistad ardorosa, apasionada)
Inteligencia viva, rápida, poco profundo, memoria feliz. Imaginación ardiente.
Triunfa fácilmente. No es sabio (ni tiene su altura)
Malas cualidades: superficialidad, inconstancia, sensualidad.
(TOMADO DE VIEJOS APUNTES -papel y bolígrafo- DURANTE EL ESTUDIO DEL TEMPERAMENTO)
eransaldii@gamil.com
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