top of page

El bosque impide ver el árbol (el circo y el malabarista)

  • Foto del escritor: Enrique R. Ansaldi
    Enrique R. Ansaldi
  • 1 dic 2020
  • 1 Min. de lectura

-¿te gustó el circo? -sí, un montón

-¿qué te gustó más? -había un malabarista que caminaba sobre un alambre allá muy alto...


Por esos años de mi niñez, del circo que llegaba al pueblo vecino, me llenaban de asombro -y temor- las andadas del malabarista sobre el alambre en lo más alto de la carpa.


Unos años más adelante un niño entre muchos niños se destacaba por su habilidad y durabilidad para hacer "jueguitos", piruetas, con la pelota de fútbol o cualquier otra cosa más o menos redonda. Un malabarista del juego y luego del deporte hasta sus treinta años.

Luego el circo del mundo infrahumano lo secuestró para sí y lo expuso fofa y desagradablemente hasta sus sesenta años, y en su muerte y peri-muerte... un bosque cada vez más salvaje, un circo de payasos de entretiempos que no nos deja ver al eximio malabarista.


Mi salud, y seguramente la de muchas otras personas, también requiere de esta diferenciación entre Diego Armando y "Maradona".


eransaldii@gmail.com

 
 
 

Entradas recientes

Ver todo
revisando, para cuidar el rumbo

la Lejanía Iniciando 2019, recordé el impacto importante que recibí observano la tapa de la revista Anteojito de diciembre alguien bajaba...

 
 
 

Comentarios


Publicar: Blog2_Post

©2019 by Enrique R. Ansaldi. Proudly created with Wix.com

bottom of page