Del ómnibus al taxi o remisse (la pandemia cuestiona también los medios de transporte)
- Enrique R. Ansaldi
- 11 may 2020
- 1 Min. de lectura
Si la pandemia está exagerada en su definción y/o, además de mal dimensionada, erróneamente conducida o administrada desde el nivel político, no es momento aun, porque todo parece en evolución, para meternos en la crítica del rumbo que estamos llevando como comunidades locales y como conjunto universal.
Las notas más interesantes, para mí, pasan por las pujas que aparecen en los modos de vida de muchas personas y sociedades.
El caso de viajar "en colectivo" por razones de costos y de ecología, y de cierta concepción no-individualista de la vida, queda en la mira, porque la rentabilidad de un vehículo grande con la mitad o mejor un tercio de los pasajeros que llevaba antes de la pandemia, seguramente está en la evaluación de sus propietarios... ¿como se ubican los pasajeros en un vehículo guardando un metro cuadrado individual?
La propuesta ya está en curso, veíamos ayer, en Inglaterra.
... tareas en casa y desde casa, a pie, en bicicleta,...
El taxi para distancias más largas...
¿ El destino de los ómnibus? ¿la clase turista de los aviones?
Porque la imposición de conductas durante la pandemia debe transformarse en conductas asumidas voluntariamente para siempre o por lo menos muy largo tiempo...
De lo contrario queda "sabor a poco"...
eransaldii@gmail.com
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